Hoy es viernes, y por lo tanto, presentamos una nueva edición de la sección “Con la firma del profesor”. En este caso, nuestra entrevistada es la educadora de párvulos del Preescolar Cantagallo, Magdalena Marín, quien nos cuenta cómo se adaptó a realizar clases online, y cómo ha podido enseñar contenidos en idioma inglés de forma cercana e innovadora.

– ¿Cómo ha sido la experiencia de hacer clases online?

“La verdad es que ha sido un gran desafío y, por lo mismo, una gran oportunidad de aprendizaje en lo tecnológico, en el desarrollo de la creatividad, en el uso de estrategias para mantener la atención y motivación de los niños, etc. Lograr que cada niño se sienta parte de la clase, sin estar físicamente conectados, no es tan fácil. Por lo mismo, hacer clases online me ha permitido, más que nunca, poner especial atención a las necesidades particulares de cada niño y poder responder a ellas de una forma mucho más personalizada y significativa.

Creo que, a pesar de la distancia y de las dificultades que conlleva la modalidad online, los niños se sienten físicamente conectados, y pienso que la clave para ello ha sido el movimiento, la música y el uso de material concreto. He aprendido que nuestro espacio hoy es la pantalla, nuestras casas y los elementos que nos rodean en ella, y ése es el lugar donde debemos encontrar conexión y desde donde podemos construir aprendizajes significativos”.

– ¿En qué consisten las cápsulas de video para enseñar inglés y cómo te han servido para hacer las clases?

“A través de las cápsulas trabajamos los diversos objetivos de aprendizaje que apuntan a exponer a los niños al inglés de forma entretenida y cercana.

Las cápsulas comienzan con una introducción motivacional donde el niño reconoce el contenido a trabajar. En el desarrollo se realiza algún juego donde tienen que verbalizar, observar, moverse, entre otros, poniendo en práctica el contenido trabajado.  Luego, como extensión a este juego, se realizan dos actividades en papel donde el niño debe aplicar el contenido dentro de un nuevo contexto. Y finalmente, se cierra la cápsula con un breve repaso donde el objetivo es que el niño se haga consciente de su proceso de aprendizaje.

Creo que el mayor aporte de las cápsulas es que han permitido mantener un proceso de enseñanza y aprendizaje constante e independiente de las posibilidades de conexión de cada niño. Cada familia se puede ajustar de acuerdo con su realidad y así todos los niños tienen la oportunidad de acceder a clases entretenidas y de calidad”.

– En general, y teniendo en cuenta que tus alumnos son de corta edad, ¿cómo ha sido la recepción de tus clases por parte de los alumnos?

“Ha sido muy buena. Creí que iba a ser más difícil el uso de la tecnología o el uso de Zoom, pero a las pocas semanas los niños ya se habían adaptado. Se ve que disfrutan de las clases, participan y están motivados.

Si bien la modalidad online tiene sus dificultades, también nos abre una gama de estrategias novedosas que para los niños han sido muy atractivas como, por ejemplo: los juegos online, la magia, los efectos especiales digitales, y sobre todo, la oportunidad que tienen ellos de usar y mostrar los elementos y espacios de sus casas”.