Hasta San Diego, Estados Unidos, se trasladó una delegación de SEDUC que asistió a un think tank de disciplina positiva, instancia en la que participaron 230 académicos de todo el mundo, pertenecientes a 60 países. Allí, las representantes de SEDUC – Carolina Prado (coordinadora académica), Carolina Barros (miembro del equipo técnico de PEIS) y Francisca Kelly (miembro del equipo técnico de Inglés) – participaron en talleres y asistieron a conferencias dictadas por expertas en esta materia; entre ellas, de Jane Nelsen, pionera de la disciplina positiva a nivel mundial.
La disciplina positiva es uno de los pilares fundamentales del programa PEIS, que se aplica entre prekínder y cuarto básico en nuestros colegios, y que trabaja el componente emotivo de la educación:
- Relaciones horizontales
- Sentido de comunidad
- Educar a largo plazo: enseñar habilidades para la vida
- Animar y dar aliento
- Amabilidad y firmeza al mismo tiempo
- Errores como oportunidad de aprendizaje
En la siguiente entrevista, Francisca Kelly nos contó un poco más de esta enriquecedora experiencia.
¿En qué consistió el think tank?
“Fueron talleres y charlas para abordar los últimos updates de lo que es la implementación de la filosofía de la disciplina positiva en diferentes países, culturas y colegios del mundo”.
¿Cuáles fueron los principales aprendizajes que obtuvieron del think tank?
“Aprendimos lo potente que es educarse con la disciplina positiva para el desarrollo integral de las personas. También cómo la disciplina positiva ha conseguido, en distintos colegios del mundo, mejores resultados académicos y de convivencia”.
¿Qué fue lo que más les sorprendió del think tank?
“Lo más sorprendente fue ver cómo la disciplina positiva ha tenido éxito en los más diferentes contextos sociales y culturales. Por ejemplo, oímos el caso de una monjita de Camerún que imparte la disciplina positiva en su colegio. En Camerún están en guerra civil, donde es peligroso seguir haciendo vida normal y también ir al colegio. Sin embargo, la disciplina positiva les ha hecho muy bien a los niños ya que aprenden valores como la paz, el respeto y a desterrar el bullying. Pese a lo peligroso que puede ser, los papás no quieren que sus niños dejen de ir al colegio”.
¿Qué viene para adelante respecto a la disciplina positiva en nuestros colegios?
“Algo que aprendimos en el think tank, y que nos tiene muy motivadas, es llevar a cabo un trabajo con los papás que se animen a participar de este lindo proyecto. Hay libros que recomiendan la disciplina positiva, y cómo ésta se puede aplicar en la vida diaria. Estos libros son “Disciplina sin Lágrimas”, “Disciplina Positiva”, “Disciplina Positiva en el Salón de Clases” y “Disciplina Positiva para Padres”.
Carolina Barros, Carolina Prado y Francisca Kelly junto a sus diplomas.